Hola amigos/as de El Terror Tiene
Forma espero que la entrada a este nuevo año haya sido genial para todos. En
este primer post del 2014 recupero una película de la cual ya había realizado
un avance hace unos meses, me estoy refiriendo a Dead Mine producción de Indonesia
bajo el auspicio de la HBO. De primeras la sinopsis: un cazador de tesoros y un
grupo de mercenarios, se adentran en la selva de Indonesia siguiendo la leyenda
del supuesto oro escondido por el general japonés Yamashita durante la Segunda
Guerra Mundial. Pronto encuentran un bunker que se adentra en las profundidades
de la tierra, ahí descubren que el ejército japonés realizó unos extraños
experimentos con prisioneros de guerra. Su búsqueda inicial pronto se convierte
en una lucha sin cuartel contra unos extraños seres mutantes y contra el
ejército imperial convertido en una especie de samuráis / zombies que protegen
las polvorientas instalaciones.
Con claras referencias a títulos
anteriores como Dead Snow (Zombies Nazis, 2009) de Tommy Wirkola o The Descent
(2005) de Neil Marshall, está bastante claro que Dead Mine no pretende resaltar
por su originalidad; la historia es típica, los protagonistas son de puro y
duro cartón piedra y el ritmo es, siendo generosos, muy desigual, sin embargo
la inocencia de su puesta en escena y su falta de pretensiones artísticas favorecen
al aficionado que quiere pasar un rato entretenido sin buscar los tres pies al
gato a la producción. La obra mezcla sin rubor el terror y la acción bélica,
deslizando algunas gotas de gore para que su visionado resulte más...húmedo.
Hay que señalar que la película puede considerarse de bajo presupuesto, esta
circunstancia provoca que el director no se ande por las ramas buscando
lucimiento personal, quiere contar la historia (y la cuenta) de forma rápida y
precisa, dando forma a un esquema que recuerda mucho a la manera de rodar este
tipo de cine en los años ochenta, por lo tanto el resultado no es nada
indigesto para el espectador, que se divierte viendo como todos los componentes
de la misión van muriendo poco a poco, obviando el hecho de que a lo largo del
metraje quedan muchos huecos por llenar y que su final parece un tanto
apresurado dando pie a pensar en una posible segunda parte.
También hay que resaltar una
buena secuencia de crédito inicial y una banda sonora bastante acertada, los
efectos son de bajo coste pero efectivos y la fotografía a cargo de John Radel está
cuidada.
Fue dirigida por el británico
Steven Sheil (Mum & Dad, 2008) y protagonizada Miki Mizuno, Sam Hazeldine,
Ario Bayu, Les Loveday, Carmen Soo, Yanda Djaitov y Ushe Badu.
Poco más que comentar, Dead Mine
se puede recomendar para pasar un rato entretenido y poco exigente, no ofrece
nada original y hay escenas bastante fuera de lugar, pero hay que valorar positivamente su habilidad para evitar el
aburrimiento, algo que por lo que se ve últimamente es un activo bastante
difícil de encontrar.
Saludos y hasta pronto.